El cuadro del ReaL Madrid dejó plantada a la prensa previo a su duelo de la Final de la Copa del Rey.
En un acto sin precedentes que ha dejado atónito al mundo del fútbol, el Real Madrid ha decidido no presentarse al entrenamiento oficial ni a la rueda de prensa previa a la final de la Copa del Rey contra el Barcelona, programada para este sábado en el estadio de La Cartuja, Sevilla. Esta decisión, calificada como un plantón monumental, va más allá de un simple gesto de protesta: el club blanco amenaza con no disputar el partido si la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no da una “respuesta convincente” en las próximas horas.
¿Por qué el Real Madrid toma esta postura radical?
La tensión estalló tras las polémicas declaraciones de los árbitros designados para la final, Ricardo De Burgos Bengoetxea y Pablo González Fuertes, en la rueda de prensa previa organizada por la RFEF. El Real Madrid considera que las manifestaciones de González Fuertes le inhabilitan para estar en el VAR durante el encuentro, lo que ha generado un rechazo frontal por parte del club. La entidad presidida por Florentino Pérez no solo canceló el entrenamiento y la rueda de prensa, sino que tampoco acudió a la cena oficial con los presidentes de los clubes, dejando claro que la protesta es total y sin precedentes.
¿Qué consecuencias tendría que el Real Madrid no juegue la final?
Si el Real Madrid finalmente decide no presentarse al partido, las consecuencias serían graves y múltiples. Según el artículo 77 del Reglamento General de la RFEF, la incomparecencia supondría la pérdida automática de la final para el club blanco, y el título no se le otorgaría directamente al Barcelona. En su lugar, el Barcelona debería enfrentarse a la Real Sociedad, equipo eliminado por el Real Madrid en semifinales. Además, el club madridista enfrentaría una multa económica que puede oscilar entre 3.006 y 12.021 euros y quedaría excluido de la próxima edición de la Copa del Rey, un castigo severo que afectaría su prestigio internacional y deportivo.
El ambiente en Sevilla: incertidumbre y polémica máxima
La capital andaluza vive un clima de máxima tensión. Con más de 30,000 seguidores madridistas ya desplazados y la final a solo horas de disputarse, la sombra de la suspensión del partido planea con fuerza. Desde la Federación se mantiene la esperanza de que el partido se juegue, pero la postura del Real Madrid ha sembrado dudas y generado un escándalo que podría marcar un antes y un después en la historia del fútbol español.
Conclusión
El Real Madrid ha lanzado un desafío sin precedentes a la RFEF y al mundo del fútbol con su plantón histórico a la final de la Copa del Rey. La polémica no solo afecta a la organización del torneo sino que pone en jaque la integridad y la imagen del deporte rey en España. La decisión del club blanco de no presentarse al entrenamiento ni a la rueda de prensa, y la amenaza de no jugar el partido, evidencian una crisis profunda que podría tener repercusiones legales, deportivas y mediáticas de enorme magnitud. El desenlace está por verse, pero lo que es seguro es que esta final ya es la más controvertida de la historia reciente del fútbol español.